miércoles, 29 de octubre de 2014

CARTA AL SR. RAJOY



Muy Sr. Mío:
Escribo esta carta abierta en castellano, en contra de lo que afirme hace un tiempo, porque pretendo que pueda usted leerla (que iluso soy, verdad ¿) en su integridad sin necesidad de interpretes.
Soy persona educada en castellano, incluso estudie tres años en San Lorenzo del Escorial (colegio y universidad) y con mis padres hablaba en castellano, la carrera la estudie íntegramente en castellano y he perdido algún cliente por no querer redactar un contrato en catalán. Estos son mis antecedentes.
Mi primer desencanto, aunque entonces no me percaté de ello, fue cuando en el colegio, allá por año 1960, me decían los hermanos de la Salle que no hablara catalán. No lo entendía pero como los demás chicos obedecían …. Cuando estuve en El Escorial solía ir a un bar a merendar y les pedía “pan con tomate” con algún acompañamiento y jamás conseguí que me lo hicieran. Me daban el pan y el tomate para que me lo hiciera yo. La verdad es que me sentía menospreciado.
De la misma forma que ahora me siento menospreciado por usted y por sus compañeros (alguien les ha llamado compinches de banda) de viaje. Me siento menospreciado porque usted que representa al Gobierno de España y al partido que más votos ha obtenido en España y que es un partido “residual” en Catalunya es quien manda en mi País.  Me siento menospreciado porque con más de 150 miembros de su partido, con cargos de responsabilidad en los diferentes gobiernos, imputados y alguno de ellos en la cárcel no ha tenido usted la gallardía de hacer nada para dotar a la justicia de los medios necesarios para que los enjuicien de forma rápida y ejemplarizante. Me siento menospreciado porque desde que está usted en el gobierno, no ha cumplido ni una sola de las promesas que ha hecho a Catalunya. Me siento menospreciado porque pone usted sus intereses personales y los de su partido por delante de los intereses de España y por descontado de los de Catalunya. Me siento menospreciado porque con su manía centralizadora y radial del país están impidiendo el desarrollo de zonas productivas y están haciendo inversiones que solamente van a producir votos a su partido. Me siento menospreciado porque están ustedes menospreciando mi idioma materno. Me siento menospreciado porque ustedes menosprecian nuestra cultura. Me siento menospreciado porque el Presidente del Gobierno de España, o sea usted, no se ha molestado en intentar aprender un idioma que le permita comunicarse con los demás Presidentes de Gobierno de Europa. Me siento menospreciado porque no es usted capaz de hacer un discurso digno ni siquiera leyéndolo. Me siento menospreciado porque es usted incapaz de someterse a una rueda de prensa en la que los periodistas le pregunten lo que quieran sin que las intervenciones estén preparadas de antemano. Me siento menospreciado porque ha sido usted incapaz de ofrecer nada a mi Gobierno y nos está poniendo contra las cuerdas y obligándonos a tomar iniciativas hacia una independencia de España. Me siento menospreciado porque lo que al principio califico usted de referéndum independentista, pasó a ser una participación ciudadana sin importancia después de ser suspendido por el T.C. y ahora, sin que haya cambiado nada, vuelve a ser un referéndum independentista. Defínase de una vez, o es que no puede definirse ¿ o no le dejan?. Me siento menospreciado porque no sabe usted hablarnos más que de ley y de constitución y aunque se autocalifica de político no entiende nada de política ni tiene talla para serlo y mucho menos presidente de gobierno y no voy a aducir ningún tipo de razones económicas, históricas ni de ningún otro tipo para decirle que me he vuelto independentista, que me han convertido ustedes en independentista y solamente porque ME SIENTO MENOSPRECIADO.  ¿Simple verdad? .
Pero también estoy contento, muy contento, porque tengo , tenemos, una ilusión, un proyecto de Pais, un futuro que podremos construirnos nosotros sin nadie que, desde dentro, nos impida progresar, ser lo que siempre hemos querido, un País, una Nación, un Estado independiente de España y voy y vamos a poner todo nuestro empeño en conseguirlo.
De momento vamos a votar. Nosotros queremos saber si en Catalunya somos mayoría los que queremos la independencia o no lo somos, porque somos tan demócratas que estamos dispuestos a aceptar el resultado de las urnas, cosa que no se puede decir de ustedes que no quieren arriesgarse ni a saber cuántos somos. ¿Tanto miedo les da saber el resultado?.
Al principio parecía que tenían miedo por nosotros, porque pensaban que no seriamos capaces de subsistir sin España a nuestro lado, pero luego ya se les vio el plumero, el miedo era por ustedes, porque saben que España no subsistirá sin nosotros los catalanes, la gallina de los huevos de oro, porque siguen con el orgullo de la villa y corte y menosprecian a “los de provincias” que trabajan y que se han de estar calladitos y sin hacer ruido para que la villa y corte pueda hacer y deshacer a su gusto. Pues si de mí, y de unos cuantos catalanes más, depende, se les ha acabado el chollo, tendrán que ponerse a trabajar si quieren pagar su deuda y tener pan en la mesa cada día.
Hasta ahora ninguna de las colonias que se han independizado de España ha solicitado volver. Por algo será. Y con Catalunya va a pasar lo mismo. Sabemos que será duro y largo, pero será, ¡esta vez sí¡.