jueves, 20 de noviembre de 2014

Sr. RAJOY



Muy Señor mío:
He podido leer en la prensa que piensa usted venir a nuestro País el próximo fin de semana para explicarnos el porqué de su absurda reacción ante nuestros deseos de independizarnos de España y también he podido leer que no va a pasar usted por el Parlament ni va a reunirse con nuestro President y que va solamente a hablar con los suyos, es decir, que va a ser un acto de partido, del PP, no del Presidente del Gobierno español, cargo que casualmente recae en su persona, aunque parezca que no lo ejerce.
Pues mire, si es así, no vale la pena que venga; los suyos ya saben y les va bien lo que piensa y como actúa, o mejor como no actúa, porque actuar, lo que se dice actuar, no actúa, esta pasivo y quieto, y a nosotros tampoco nos interesa ni siquiera escuchar la noticia en el telediario porque ya sabemos lo que dirá: Mientras yo sea Presidente....., y así no vamos a ninguna parte y solo nos hace perder el tiempo y nuestro tiempo vale mucho, tal vez el suyo no, pero el nuestro sí que vale y como es nuestro lo vamos a administrar nosotros.
Dos millones trescientos mil catalanes, y subiendo, ya le hemos dicho que pasamos de ustedes y hemos expresado en las urnas nuestra voluntad. Que todavía somos pocos, de acuerdo, pero vamos en aumento. Cada vez que usted o alguno de los suyos hace o dice algo, nuestro número aumenta, así que solo es cuestión de tiempo, además ahora ya sabemos cuántos somos y lo que nos falta para marcharnos, que no es tanto y con las querellas a nuestro President y compañía ya somos un montón más..
Yo creo que está usted haciendo el ridículo, o mejor, que continua haciéndolo, parece mentira que no se dé cuenta que los suyos le están haciendo la cama, que le queda a usted de presidencia lo que queda de legislatura a todo estirar y que será el responsable de haber perdido  Catalunya. Otra colonia que se va para no volver, porque aunque estemos todavía dentro de España, ya nos hemos ido, ahora es solo un problema puramente formal que ya se encargarán los políticos de solucionar de una forma u otra.
¡Que tranquilo me quedé después de depositar mi voto¡, claro, usted no se lo puede imaginar, fue como cuando de pequeño entraba en Andorra y me sentía en casa y no sabía porque. Ahora lo sé, allí podía hablar en catalán sin que a nadie le extrañara ni me mirara mal ni me interpelaran por ello como me ocurría en el colegio. Será magnifico no depender de ustedes, del Gobierno de España, porque la mayoría de los españoles si les permitieran informarse bien de lo que ocurre, pensarían lo mismo que nosotros pero como les tienen secuestrada la información y la que reciben esta sesgada pues pasa lo que pasa.
En fin, Sr. Rajoy, tenga usted buen viaje a Barcelona y procure que los gastos los pague su partido, no sea que le pongan una querella por malversación de fondos.