miércoles, 13 de junio de 2012

Respeto mutuo.

No puedo menos que estar de acuerdo con las palabras del Sr Alfred Bosch (ERC) en el Parlamento español cuando criticaba hace un par de días que por el hecho de que la "estelada" no es una bandera española sino la de algunos (cada vez más) catalanes, y por lo tanto no era de las que defiende el PP, no se tenia que proteger de pitadas e insultos.

Pero si me hubiera quedado alguna duda de que ambas se merecen el mismo respeto porque ambas representan el pensamiento de muchas personas y al mismo tiempo van contra el pensamiento de muchas personas, esto ha quedado totalmente desvirtuado al ver, leer y oír el tratamiento que muchos medios han dado al Sr. Bosch, aplicándole toda clase de calificativos peyorativos e incluso insultos, pero sin ningún fundamento o razonamiento lógico mas allá de la pataleta o la rabia.

Disentir es bueno, crea discusiones y provoca razonamientos que, bien fundamentados, pueden hacer cambiar de opinión a alguien que no piensa como nosotros, pero que si no se fundamentan y ademas para soportarlos solo se utiliza el descrédito y el insulto, no hacen mas que fortalecer las ideas del proponente y el descrédito del oponente.

Si quieren ustedes que cambiemos (los catalanes, y cada vez mas ) de manera de pensar, no nos maltraten, no nos quiten lo que en equidad nos pertenece porque lo hemos generado nosotros, no nos impongan lo que debemos pensar,  no nos impongan en que idioma debemos expresarnos, no nos insulten cuando les decimos lo que pensamos porque así no van a conseguir lo que pretenden, así solamente están consiguiendo que cada día nos sintamos mas catalanes, mas orgullosos de lo nuestro y mas lejos de lo suyo, nos están separando, discriminando y desilusionando de la lejana posibilidad de plantearnos un objetivo común, estan consiguiendo lo que a muchos de nosotros nos parecía imposible, que se creara un autentico sentimiento de catalanidad y de país, que fuéramos todos a una como Fuenteovejuna, que una "senyera" nos uniera.

Están ustedes, con su actitud hacia nosotros, consiguiendo que lleguemos al punto de no retorno, que como los aviones o despegan o se estrellan, y estoy cada día mas convencido de que los catalanes vamos a intentar despegar, solo hace falta que nos den un pequeño empujoncito para recorrer esos pocos metros que nos faltan de la pista de despegue para que tomemos la decisión.

Asi que si no quieren que esto suceda, con todas las consecuencias que ello puede conllevar para todos, ustedes y nosotros, trátennos tan bien como nosotros los hemos tratado a ustedes, déjennos administrar lo que es nuestro  que nosotros sabremos compensarles por ello, déjennos hablar como nos de la gana, déjennos tener nuestros símbolos y la llave de nuestra casa a la que siempre estarán invitados, déjennos enseñar a nuestros niños a nuestra manera y cuidar a nuestros enfermos y a nuestros ancianos como mejor sepamos, déjennos poner nuestras banderas, déjennos tener nuestras industrias, nuestras selecciones deportivas, nuestras delegaciones comerciales, déjennos sentirnos País, déjennos ser País y verán lo bien que nos entendemos.